En la Edad Media, el matrimonio entre judíos era considerado un contrato entre partes y para su constitución era obligatoria la elaboración de una ketubá, el documento que lo legalizaba. Así, el contrato matrimonial era imprescindible para hacer vida marital y, en caso de extravío o mala conservación, cabía realizar una copia inmediatamente. La ketubá, escrita en hebreo y arameo, era redactada en pergamino por un sofer o escribano judío con anterioridad a la ceremonia de nisuín o boda. El contrato solía prepararse en la localidad de residencia de las familias de los contrayentes, si bien no siempre se correspondía con el lugar de celebración del casamiento o con el domicilio del futuro matrimonio. Además, parece claro que el diseño formal de la ketubá (en lo relativo a tamaño y decoración) dependía de la capacidad económica de las familias de los contrayentes y de sus gustos, no estando permitida su reutilización.
En la ketubá se registraban los datos personales del novio y de la novia y su filiación, además de las cantidades económicas que cada parte aportaría para la fundación de la nueva entidad familiar. Estas contribuciones aparecen expresadas en el cuerpo principal, aunque hay ketubot que presentan un apartado adicional, en el que se establece el marco jurídico-legal que debía amparar la relación de los cónyuges durante el matrimonio y tras su disolución, de acuerdo con las costumbres establecidas por la comunidad en la que estos se integrarían. Por último, las firmas de los testigos, entre los que se podía encontrar el propio escribano de la ketubá, dotaban al documento de validez legal. En ocasiones, el novio también firmaba con el propósito de reafirmar su compromiso para con su prometida y la familia de esta.
Dos décadas después de la publicación de Medieval Ketubot from Sefarad 1 Lacave 2002. , obra en la que el hebraísta José Luis Lacave compiló y estudió por primera vez las ketubot hispano-medievales, el hallazgo de fragmentos de contratos matrimoniales en hebreo todavía invita a reflexionar sobre su tipología documental, las cláusulas que incorporan y el contexto histórico al que pertenecen. En octubre de 2021, un usuario del Arxiu Històric de Girona solicitó el manual 993 de Peralada, correspondiente a los años 1413-1423. Al abrir el libro se percató de que las cubiertas eran un pergamino hebreo reutilizado. El responsable del archivo, Joan Ferrer, contactó con Irene Llop, que identificó el documento como una ketubá y propuso a Marina Girona llevar a cabo un estudio conjunto.
El inicio de la investigación en torno a esta ketubá, que había permanecido en-cubierta 2 Expresión acuñada en Castaño 2009. hasta ahora, planteaba dudas en torno a su origen o procedencia, puesto que el texto hebreo formaba parte de un protocolo notarial de Peralada que hoy se conserva en Girona3 Peralada y Castelló d’Empúries forman parte del Distrito Notarial de Figueres desde su creación en 1866. La Ley del Notariado de 28 de mayo de 1862 y el posterior Decreto de 1869 sentaron las bases del notariado moderno y determinaron la formación de archivos de protocolos de distrito notarial. En el año 1938, los libros anteriores a 1800 fueron trasladados a Viladrau, a la masía Noguer, y después de la guerra civil española fueron enviados al Archivo de la Corona de Aragón. En 1952, los protocolos del distrito de Figueres fueron depositados en el recién inaugurado Arxiu Històric Provincial de Girona. Desde entonces, el archivo alberga la documentación notarial de Peralada (1282-1808) y Castelló d’Empúries (1260-1799), vid. Pagarolas y Sabaté 2005, 126-130. . Otra cuestión era si se trataba de un documento inédito o si, por el contrario, alguien se había percatado de su existencia. En este caso, una temprana consulta a Javier Castaño permitió averiguar que con anterioridad a Medieval Ketubot, mosén Miquel Pujol i Canelles, estudioso dedicado al área de Castelló d’Empúries, había incorporado en su libro dedicado a los judíos de dicha localidad una imagen parcial de la ketubá. Sin referencias que facilitaran su localización, Pujol escribió en el pie de foto: «Fragment d’una Ketubà, originària de l’aljama de Castelló d’Empúries»4 Pujol i Canelles 1997, 60. .
En este artículo, exploraremos la tipología de los documentos hebreos hallados en los archivos catalanes. Seguidamente, nos centraremos en el conjunto de las ketubot catalanas que conocemos, actualizando el listado publicado por José Luis Lacave y abordando sus datos espaciotemporales, estructura y contribuciones económicas. Tras esto, ahondaremos en el hallazgo y contenido de la ketubá de Girona 3 a la luz de otros pergaminos hebreos catalanes con el objetivo de desvelar algunas claves que contribuyan a una adecuada contextualización histórica, además de sus características formales como documento contractual de primer orden.
1. Documentos hebreos en los archivos catalanes
⌅Los archivos catalanes son ricos en documentación medieval sobre las comunidades judías y sus individuos 5 La base de datos en línea Yerusha. European Jewish Archives Portal, proyecto de la Rothschild Foundation Hanadiv Europe, incorpora algunas colecciones archivísticas sobre los judíos de Cataluña, que han sido elaboradas por Irene Llop en el marco del proyecto OPE01564. Yerushat Sefarad: Documentary collection in Spanish Archives concerning Jews, dirigido por Javier Castaño, vid. http://www.yerusha.eu [consulta: 31 de julio de 2023]. . Se trata, en su mayoría, de fuentes de diferente procedencia y factura escritas en latín y romance6 Ejemplo de ello son los Libri Iudeorum, en los que los notarios públicos de algunas ciudades de Cataluña registraron actos formalizados exclusivamente por judíos. A través de estos libros se han estudiado determinados aspectos de la vida cotidiana de los judíos catalanes (capitulaciones matrimoniales, préstamos, testamentos, etc.), vid. Ollich y Casas i Nadal 1985; Llop i Jordana 1999; Aleixandre i Segura 2004; Llop i Jordana 2014. Pese a la asunción general de que en Girona no se conservan Libri Iudeorum, cabe precisar que sí que se han conservado diversos libros datados entre mediados del siglo xiv y finales del siglo xv. En concreto, se trata de 21 libros redactados por diez notarios, por lo que no es una serie continuada, sino manuales notariales en los que se concentra la presencia judía, vid. I. Llop-Jordana, «Notarial District of Girona. Girona». Yerusha. European Jewish Archives Portal, vid. https://www.yerusha-search.eu/viewer/metadata/CSC-0043/1/LOG_0000/ [consulta: 17 de noviembre de 2023]. Además de estos libros, otros notarios públicos registraron los contratos formalizados por y entre judíos, en menor número pero de manera significativa, a lo largo de su actividad; este sería el caso de Bernat Pintor, activo hasta 1407, cf. Guerson y Wessell Lightfoot 2020, nota 67. , si bien también se conserva un número reducido de textos en hebreo generados o recibidos por comunidades, familias o individuos judíos, que requieren el conocimiento de la paleografía hebrea. De tipología diversa, especialmente se han preservado compraventas, donaciones, préstamos y contratos matrimoniales que, al igual que los contratos registrados en la documentación notarial, poseen validez pública por haber sido formalizados por un sofer7 Un trabajo de referencia por incorporar, actualizar y compilar documentos hebreos medievales hallados en los archivos catalanes es Klein 2004. .
Se entiende que los judíos que marcharon al exilio a consecuencia de la expulsión de 1492 o en otros momentos llevaron consigo su documentación privada con el propósito de continuar viviendo en la fe judía. Sin embargo, esto no quiere decir que los que optaron por quedarse y convertirse al cristianismo se deshicieran de sus escritos en hebreo o aljamía, ya que podrían ser requeridos en algún momento para ratificar algún compromiso contractual; es decir, estos documentos no solo eran pruebas testimoniales de un pasado judío, sino que le conferían legitimidad. También cabe tener en cuenta que muchos documentos fueron destruidos a consecuencia de los saqueos y expolios a los que se ha visto expuesto el territorio hispánico y, en particular, el catalán, a lo largo de su historia, además de estar condicionados por el devenir y circunstancias de cada archivo; sirva como ejemplo general la destrucción de documentación perpetrada en el contexto de la guerra de la Independencia (1808-1814). En definitiva, la suerte de que se conserve, o no, un documento depende de que su valor se haya mantenido en el tiempo (ya sea por su connotación jurídica o por ser contemplado como testimonio histórico) o de una amplia variedad de factores difíciles de conocer con exactitud.
Hoy en día, el corpus de documentos catalanes escritos en hebreo y aljamía sigue sujeto a incorporaciones inesperadas; de vez en cuando, aparecen pergaminos o fragmentos escondidos entre volúmenes, en cubiertas de libros o también reutilizados como material de refuerzo para engrosarlas. En el Arxiu Històric de Girona se han localizado más de un millar de piezas entre las cubiertas de protocolos notariales, como la ketubá de Castelló d’Empúries o las cuentas de Jucef Sabarra, de ahí que Mauro Perani y otros especialistas 8 Vid. Perani 1999; Valls i Pujol 2013, 2016. se refieran a este fondo como “guenizá9 Una definición crítica del concepto guenizá se aporta en Feliu 2011. de Girona”, aunque cabe recordar que no todos los documentos se refieren a esta ciudad10 Una de esas series de documentos hebreos relacionados con asuntos crediticios y financieros se ha conservado entre los registros de Pere Pinós, notario de Girona, cf. Guerson y Wessell Lightfoot 2020, nota 6. .
Además del Arxiu Històric de Girona, también se han recuperado partes de manuscritos hebreos en otros archivos de la ciudad. En el Arxiu Municipal de Girona se conservan 141 fragmentos que contienen comentarios religiosos, tratados médicos o farmacéuticos y libros de cuentas 11 El fondo de manuscritos hebreos del Arxiu Municipal de Girona se puede consultar en línea, vid. https://www.girona.cat/sgdap/cat/recurs_jueus_documents.php [consulta: 3 de septiembre de 2023]. Una muestra de su interés potencial queda patente en Casals Stenzel 2014. . Los fondos del archivo histórico y del municipal son complementarios, dado que se han identificado, en ambos archivos, documentos escritos por la misma mano.
En el Arxiu Diocesà de Girona y el Arxiu Capitular de la Catedral de Girona se han hallado fragmentos hebreos en las cubiertas de diversos libros, en su mayoría textos bíblicos, poemas litúrgicos y comentarios talmúdicos 12 Cortès i Minguella 1982. . En el diocesano se conserva una parte de un cuaderno de cuentas que forma una unidad documental junto con fragmentos procedentes del Arxiu Històric de Girona, del Arxiu Municipal de Girona y del CRAI Biblioteca de Fons Antic de la Universitat de Barcelona13 El manuscrito del CRAI Biblioteca de Fons Antic de la Universitat de Barcelona no se ha localizado. .
Atrás en el tiempo, resulta de especial interés la compilación de manuscritos hebreos provenientes de la Pia Almoina de la Seu de Girona, que fueron publicados por Isidore Loeb 14 Loeb 1885. y Josep Maria Millàs i Vallicrosa15 Millàs i Vallicrosa 1927. . Algunos de esos documentos (Loeb I-II y Millàs I), que radican hoy en el Arxiu Diocesà de Girona16 Arxiu Diocesà de Girona (en adelante, ADG). Pergamins de la Pia Almoina, 4034 (signatura antigua: Girona, 249). , se refieren a la compraventa de unas casas sitas en Girona, los cuales no solo son relevantes por estar escritos en hebreo o por contener información relacionada con las aljamas judías de Girona y Besalú, sino, y sobre todo, porque constatan la importancia de preservar los contratos formalizados por los cónyuges a lo largo del matrimonio.
La localización de la nueva ketubá reutilizada como cubierta de un manual de la notaría de Peralada conservado en el Arxiu Històric de Girona reaviva el descubrimiento de nuevos fragmentos de pergamino escritos en hebreo, aportando nuevos datos para conocer mejor las características de las ketubot catalanas, además de desvelar uno de los hitos de la historia de las familias protagonistas.
2. Las ketubot catalanas
⌅Hasta la fecha, teníamos constancia de diecisiete ketubot catalanas formalizadas por individuos judíos en Cataluña. En Medieval Ketubot from Sefarad se recogen doce de ellas 17 Todas las signaturas han sido actualizadas a fecha de noviembre de 2023. : Barcelona 1 (1386)18 Archivo de la Corona de Aragón (en adelante, ACA). Diversos y colecciones. Cartas hebreas, 6, cf Millàs i Vallicrosa 1959 (incluye una fotografía); Riera i Sans y Udina i Martorell 1978, 26-28, doc. 6; Lacave 2002, 15, 31-32, 167-168 (incluye una fotografía). , Barcelona 2 (1390)19 ACA. Diversos y colecciones. Cartas hebreas, 7, cf. Riera i Sans y Udina i Martorell 1978, 28-30, doc. 7. También se publicó una fotografía con una nota breve en Romero 1991, 282; Lacave 2002, 16, 32-33, 169-172 (incluye una fotografía). , Barcelona 3 (siglo xiv)20 ACB. Pergaminos hebreos Millàs, xxvii, cf. Millàs i Vallicrosa 1927, 90-91, 155, doc. xxvii (añade una traducción al catalán y una fotografía 155); Lacave 2002, 16, 33-34, 173 (incluye una fotografía). Agradecemos a Clara Jáuregui, del Arxiu Capitular de Barcelona, por la información que nos ha proporcionado sobre las ketubot conservadas entre los manuscritos hebreos. , Barcelona 4 (1343)21 ACA. Diversos y colecciones. Cartas hebreas, 14, cf. Riera i Sans y Udina i Martorell 1978, 32-34 (incluye una fotografía); Lacave 2002, 16-17, 34, 174-175 (incluye una fotografía). , Barcelona 5 (1261)22 ACB. Pergaminos hebreos Millàs, xxviii. Se trata de una copia inserta en un documento relacionado con el traspaso de un viñedo, cf. Millàs i Vallicrosa 1927, 91, 157, doc. xxviii (añade una traducción parcial al catalán y una fotografía); Lacave 2002, 17, 34-35, 176-177 (incluye una fotografía). , Barcelona 6 (siglo xiii)23 Biblioteca de Catalunya (en adelante, BC). Manuscrit 254/7, cf. Romano 1974, 311-312; Lacave 2002, 17, 36, 178 (incluye una fotografía). Agradecemos a la Secció de Manuscrits de la Biblioteca de Catalunya, en especial, a Anna Gudayol, por la información que nos ha proporcionado sobre el manuscrito. , Bellpuig (1435)24 Arxiu Comarcal de la Segarra (en adelante, ACS). Documents hebreus, 2, cf. Blasco Orellana, Calders Artís y Magdalena Nom de Déu 2005, 184-185; Lacave 2002, 18, 41-43, 186-189 (incluye una fotografía). , Cervera 1 (1439)25 ACS. Documents hebreus, 3, cf. Blasco Orellana, Calders Artís y Magdalena Nom de Déu 2005, 185; Lacave 2002, 18, 36-38, 179-181 (incluye una fotografía). , Cervera 2 (1442)26 ACS. Documents hebreus, 1, cf. Blasco Orellana, Calders Artís y Magdalena Nom de Déu 2005, 186; Duran Sampere y Schwab 1974, 105-109 (añade una traducción al francés); Lacave 2002, 18, 38-41, 182-185 (incluye una fotografía). , Manresa (siglo xiv)27 Arxiu Comarcal de Bages (en adelante, ACBG). Quetubà (pendiente de catalogación), cf. Gasol 1991; Lacave 2002, 19, 43-44, 190-191 (incluye una fotografía). , Santa Coloma de Montbui (1335)28 Arxiu Comarcal de l'Anoia (en adelante, ACAN). Parròquia de Santa Maria d’Igualada. Pergamins, 89, cf. Vives i Sabaté 1987, 77, núm. 89; Blasco Orellana y Magdalena Nom de Déu 2002; Lacave 2002, 19-20, 44-45, 193-194 (incluye una fotografía). , Vic 1 (siglo xiii)29 Arxiu i Biblioteca Episcopal de Vic (en adelante, ABEV). Manuscrits, 290/1, cf. Cortès i Minguella 1984, 10 (añade una traducción al catalán y notas); Lacave 2002, 19, 44, 192 (incluye una fotografía). . A estas, se sumaron cinco ketubot publicadas tras la desaparición de Lacave: Besalú (1336)30 Arxiu Comarcal de la Garrotxa (en adelante, ACGAX). Notarial, Besalú, volum 2003, fols. lr-3r., cf. Donat 2011. , Castelló d’Empúries (1377)31 Hallada en el AHG (Notaria de Castelló d’Empúries. Protocol notarial de Francesc Bach, vol. 764) y cedida por dicha institución al Museu d’Història dels Jueus (Girona), cf. Perani 2010, 145-148. , Girona 1 (1355)32 AHG. Protocols de Girona 5. J. de Fontcoberta, vol. 400, fols. 163-165r, cf. Planas Marcé 2013, 56-59. Agradecemos a Joan Ferrer i Godoy, director del Arxiu Històric de Girona, por proporcionarnos una copia del documento. , Girona 2 (¿siglo xv?)33 Arxiu Capitular de la Catedral de Girona (en adelante, ACG). Fragments hebreus de l’Arxiu Capitular de Girona, Fragment xxxv (13.416), cf. Cortès i Minguella 2022, 202-204, 241 (incluye una fotografía). y Vic 2 (siglo xiii)34 ABEV. Manuscrits, 290/2, cf. Llop i Jordana 2000. . Actualizamos el listado con el pergamino de la recién hallada ketubá de Girona 3 (finales del siglo xiii ‒ inicios del siglo xiv)35 AHG. Col·lecció de manuscrits hebreus de l'Arxiu Històric de Girona, 15. Reproducción disponible en el portal de Arxius en línea de la Generalitat de Catalunya, vid. https://arxiusenlinia.cultura.gencat.cat/#/cercaavancada/detallunitat/AHG170-475-T2-361 [consulta: 24 de abril de 2023]. , que es la segunda extraída de los fondos del Arxiu Històric de Girona. Por lo tanto, el total de ketubot catalanas conocidas (aunando las que se conservan en su pergamino original, las copias autenticadas y las traducciones al romance36 Al igual que hizo Lacave con las ketubot de Barcelona 4, Barcelona 5, Mallorca 4 y Trijueque, seguimos su estela al incorporar al conjunto documental las copias y traducciones de ketubot hoy desaparecidas, puesto que reproducen, en su integridad o de manera parcial, el contenido del contrato matrimonial y las cláusulas añadidas. En otras regiones también se documentan solicitudes de copia y traducción de ketubot, como recientemente ha constatado Guillermo López Juan en los fondos del Arxiu del Regne de València. ) es, actualmente, de dieciocho37 Este número se podría ver acrecentado con cuatro copias de ketubot de Barcelona, que fueron traducidas al romance en el siglo xiv, cf. Lacave 2002, 12; Escribà 1995, docs. 1144, 1146, 1151 y 1152. Desde el Departamento de Referencias del Archivo de la Corona de Aragón se nos ha informado de que actualmente el manuscrito en cuestión no se encuentra disponible para su consulta por estar gravemente deteriorado. .
Denominación y fecha | Archivo | Población registrada en la ketubá |
---|---|---|
Barcelona 1 (1386) | ACA (Barcelona) | Barcelona |
Barcelona 2 (1390) | ACA (Barcelona) | Barcelona |
Barcelona 3 (siglo xiv) | ACB (Barcelona) | |
Barcelona 4 (1343) (copia en hebreo) | ACA (Barcelona) | |
Barcelona 5 (1261) (copia en hebreo) | ACB (Barcelona) | Barcelona |
Barcelona 6 (siglo xiii) | BC (Barcelona) | |
Bellpuig (1435) | ACS (Cervera) | Bellpuig o Anglesola |
Besalú (1336) (copia traducida al catalán) | ACGAX (Olot) | Besalú |
Castelló d’Empúries (1377) | AHG (Girona) | Castelló d’Empúries |
Cervera 1 (1439) | ACS (Cervera) | Cervera |
Cervera 2 (1442) | ACS (Cervera) | Cervera |
Girona 1 (1355) (copia traducida al catalán) | AHG (Girona) | Girona |
Girona 2 (¿siglo xv?) | ACG (Girona) | |
Girona 3 (finales siglo xiii ‒ inicios siglo xiv) | AHG (Girona) | |
Manresa (siglo xiv) | ACBG (Bages) | |
Santa Coloma de Montbui (1335) | ACAN (Igualada) | Santa Coloma de Montbui |
Vic 1 (siglo xiii) | ABEV (Vic) | |
Vic 2 (siglo xiii) | ABEV (Vic) |
De las catorce ketubot conservadas en su pergamino original, seis contienen el contrato completo y ocho son fragmentos que recogen el contenido parcialmente. En tres de ellos (Barcelona 1, Barcelona 2 y Cervera 1) se incluye el recibo de la dote en cursiva, por el que el novio reconoce haber recibido la totalidad del dinero estipulado. Asimismo, las ketubot de Cervera 2 y Bellpuig contienen en el cuerpo de texto la autenticación de la ketubá por parte de un tribunal judío o betdín.
Fragmentos de ketubot | Barcelona 3 (parte inferior); Barcelona 6 (parte inferior); Castelló d’Empúries (parte superior e intermedia); Girona 2 (parte intermedia lateral derecho); Girona 3 (parte inferior); Manresa (parte inferior); Vic 1 (parte intermedia); Vic 2 (parte superior e intermedia central). |
Ketubot íntegras | Barcelona 1 (con recibo de la dote); Barcelona 2 (con recibo de la dote y cláusulas); Bellpuig (con recibo de la dote, cláusulas, estipulación particular y autenticación por parte de un tribunal judío); Cervera 1 (con cláusulas y recibo de la dote); Cervera 2 (con recibo de la dote, cláusulas y autenticación por arte de un tribunal judío); Santa Coloma de Montbui. |
En cuanto a las copias en hebreo (Barcelona 4 y Barcelona 5, esta última autenticada por un betdín) y las traducciones al catalán (Besalú y Girona 1), todas ellas han transmitido el contenido de la ketubá por completo, a excepción de Barcelona 4, que solo conserva las cláusulas y el recibo de la dote (parte inferior del manuscrito).
La cronología de las ketubot catalanas comprende tres siglos medievales (siglos xiii-xv) 38 La estructura del contrato, basada en un formulario o modelo estándar, no sufre modificaciones pese a la amplitud del periodo. . La fecha más temprana es el año 1261 (Barcelona 5), si bien hay cuatro ketubot más atribuidas al siglo xiii, entre las que se encuentra la ketubá que nos concierne (finales del siglo xiii ‒ inicios del siglo xiv). La centuria con más representaciones es el siglo xiv, con nueve ketubot, mientras que para el siglo xv contamos con cuatro, siendo la fecha más tardía el año 1442 (Cervera 2).
Por otro lado, el origen geográfico de las ketubot catalanas no siempre se corresponde con la población del archivo que las conserva: Barcelona (ACA, ACB, BC); Cervera (ACS); Manresa (ACBG); Vic (ABEV); Igualada (ACAN); Girona (ACG, AHG); y Olot (ACGAX). Más de la mitad indican el lugar en el que se formalizó el contrato: Barcelona, Cervera, Bellpuig, Besalú, Santa Coloma de Montbui y Castelló d’Empúries. Pese a que la referencia espacial se limita al nombre de la ciudad/villa, en ocasiones, aparecen datos interesantes como la referencia a Santa Coloma de Montbui como aldea (kefar), la relación de dependencia de Bellpuig con Anglesola o el detalle de mencionar la ciudadela de Cervera (migdol Cervera).
2.1. Estructura y contenido
⌅En general, la ketubá consta de un encabezado compuesto por la fecha y el lugar donde se redactó, el nombre de los contrayentes, su filiación y procedencia, así como las contribuciones económicas realizadas por las partes: el móhar (precio de la novia), la nedunyá (dote) y la toséfet (arras) 39 Información en extenso sobre el cuerpo de la ketubá y sus variaciones regionales se puede leer en Lacave 2002. Para el caso particular de Castilla, vid. Girona Berenguer 2020, 91-124. .
La contribución básica que el novio entregaba para formalizar el compromiso era el móhar. Esta cantidad, fijada por prescripción rabínica, simbolizaba la adquisición de la novia y el traspaso de su tutela jurídica, que hasta el momento había recaído en su padre o tutor legal. El valor del móhar siempre aparece expresado en zuzim, una moneda de plata en curso en la Judea romana, aunque la cantidad variaba en función de si la mujer era doncella (200 zuzim), viuda o divorciada (100 zuzim). La cantidad del móhar no se suele incluir en la suma total de las contribuciones económicas de las ketubot catalanas, puesto que se consideraba una aportación simbólica.
La familia de la novia aportaba al casamiento la nedunyá 40 El importe de la dote contenido en las distintas ketubot catalanas es el siguiente: Barcelona 1: 4.400 sueldos barceloneses, apreciados en 4.500 sueldos barceloneses; Barcelona 2: 5.000 sueldos barceloneses (2.400 sueldos barceloneses provienen de la dote del primer matrimonio de la novia); Barcelona 5: 1.200 maravedís; Bellpuig: 2.850 sueldos barceloneses (1.300 sueldos barceloneses provienen de la herencia de la madre); Besalú: 200 morabatines alfonsíes, apreciados en 210 morabatines alfonsíes; Cervera 1: 700 sueldos barceloneses; Cervera 2: 9.000 sueldos barceloneses; Girona 1: 12 morabatines alfonsíes; Santa Coloma de Montbui: 5 florines de oro y 100 morabatines alfonsíes. , compuesta por dinero y/o bienes muebles, entre los que se encontraba el ajuar. A través de la dote, la familia de la novia transmitía parte de su patrimonio, de ahí la importancia de mantener íntegro su importe. El marido ostentaba el rango de gestor de los bienes matrimoniales y aunque, en teoría, no podía realizar transacciones con estos como medida para prevenir su despilfarro, embargo o alineación, en la praxis se atestigua que, en no pocas ocasiones, este capital extra solía ser invertido, con menor o mayor fortuna, en algún proyecto a corto plazo.
La toséfet o añadido (en catalán, escreix) era la cantidad que el novio aportaba para compensar la dote traída por la novia. Sin embargo, esta contribución no tenía la finalidad de engrosar el patrimonio matrimonial, sino de reforzar el compromiso entre las partes y dificultar el divorcio, un derecho del que disfrutaba el marido (la mujer podía solicitarlo en determinados casos bajo la aprobación de un betdín). Las aportaciones hechas por las familias de los contrayentes se veían supeditadas al patrimonio de cada una de las partes y/o a la costumbre del lugar. De hecho, la mayoría de las ketubot catalanas incluyen una toséfet de 200 sueldos de plata 41 La cantidad aportada como añadido en las distintas ketubot catalanas es la siguiente: Barcelona 1: 200 sueldos de plata; Barcelona 2: 200 sueldos de plata; Barcelona 3: 200 sueldos de plata; Barcelona 5: 200 sueldos de plata; Bellpuig: 200 sueldos de plata; Besalú: 200 sueldos de plata; Cervera 1: 200 sueldos de plata; Cervera 2: 100 sueldos de plata; Girona 1: 200 sueldos de plata; Santa Coloma de Montbui: 200 sueldos de plata; Vic 2: 200 dineros grandes. , lo que reafirma la segunda idea.
Asimismo, en alguna ketubá se hace referencia a la mataná leḥud o donación aparte, si bien no parece ser que fuera habitual registrarla en el mismo cuerpo del contrato. Por ejemplo, en el caso de Barcelona 6 el novio se compromete con una donación de 500 florines de oro, mientras que en el texto de Santa Coloma de Montbui, esta contribución asciende a 50 florines de oro.
La parte principal del contrato era sancionada con la fórmula del quinyán y, seguidamente, con una cláusula de garantía conocida como aḥarayut o responsabilidad, por la que el novio se obligaba y comprometía a velar por los derechos matrimoniales de su futura mujer. En varias ketubot también consta una fórmula final que confirma que el contrato se redactó de acuerdo con las costumbres legales y las leyes de la comunidad judía en cuestión. La sentencia «i tot és ferm i estable», de raigambre talmúdica, sellaba de forma definitiva el acuerdo entre las partes, a lo que contribuían las firmas de los testigos 42 Hombres adultos, de buena fama, sin vínculos de sangre con los contrayentes. (dos o tres), entre los que solía encontrarse el sofer de la ketubá.
2.2. Condiciones generales en torno al patrimonio matrimonial
⌅La ketubá y los documentos relativos al matrimonio, como las donaciones o matanot, estaban reforzados por una cláusula de garantía denominada aḥarayut. En las ketubot, esta fórmula, que se escribía en la parte final del contrato, simbolizaba el compromiso del novio a preservar los bienes registrados y a restituirlos a su futura mujer o a sus familiares tras la disolución del matrimonio. De este modo, el contrato por nupcias adquiría las características propias de una hipoteca desde el momento en el que el novio se obligaba con su persona y patrimonio a hacer frente a la custodia y pago de los bienes estipulados; es decir, si por alguna razón se viera incapaz de restituirlos, el pago se realizaría del resto de sus bienes propios.
La responsabilidad sobre los bienes matrimoniales o los transmitidos a través de donaciones no solo recaía en el novio, sino que, en determinados casos, sus familiares directos (especialmente, los progenitores) también se ofrecían garantes de la ketubá y/o de las matanot. La participación de los padres del novio tenía como propósito estrechar lazos con la familia de la novia y, por supuesto, reforzar el compromiso matrimonial. El incumplimiento de esta cláusula podía comportar la prisión y el embargo de los bienes del novio y/o de los garantes, más allá del surgimiento de conflictos inter- e intrafamiliares.
En la documentación catalana (ya sea en latín o en romance) 43 Sarah Ifft Decker ha constatado el esfuerzo de notarios públicos como Joan de Fontcuberta, de Girona, por traducir al latín o al romance diversas cláusulas legales en hebreo relacionadas con los bienes matrimoniales, vid. Ifft Decker 2022, 50. , el término aḥarayut también se emplea para hacer referencia al tercio de la dote, que se custodiaba en un arca bajo llave hasta que el matrimonio resultara exitoso (por ejemplo, al transcurrir dos años desde la formalización o tras el nacimiento del primer descendiente)44 Noticias en torno a la inclusión del concepto aḥarayut en la documentación latina del siglo xiv se pueden leer en Aleixandre i Segura 2004, 74, doc. 79; 362-363, docs. 560-561. . En caso de que la novia falleciera durante el primer o segundo año de matrimonio y sin hijos, dicho tercio debería ser restituido a su familia sin objeción.
En este sentido, en cinco ketubot catalanas se expresa la cantidad de la dote a restituir a la familia de la novia en caso de que esta falleciera de manera prematura. En las cláusulas contenidas en la ketubá de Barcelona 2 (1390) se incluye la promesa del novio a devolver a su futuro cuñado 800 sueldos barceloneses (un tercio de la dote), si la novia falleciera sin dejar hijos mayores de 30 días. En las ketubot del siglo xv (Bellpuig, Cervera 1 y Cervera 2) también se incorpora la obligación de restituir un tercio de la dote a la familia de la novia en caso de deceso en los términos anteriormente expuestos. El cumplimiento real de esta cláusula se evidencia en un recibo relacionado con la ketubá de Barcelona 4 (1343), que contiene el pago efectivo de 500 sueldos barceloneses (un tercio de la dote) por parte del novio y su padre al hermano de la novia fallecida 45 Aunque no sabemos cuál era la cantidad exacta de la dote aportada por la novia, suponemos que estaría próxima a los 1.500 sueldos barceloneses. .
3. La ketubá de Girona 3
⌅El pergamino de la ketubá de Girona 3 recoge las condiciones económicas del matrimonio de Reina, hija de Šelomó ha-Cohén b. Neḥemía, e Yiṣḥac b. David. Por razones desconocidas, el manuscrito acabó siendo reaprovechado en la primera mitad del siglo xv como cubierta de un manual notarial (años 1413-1423) perteneciente al fondo de Peralada, que hoy se encuentra en el Arxiu Històric de Girona.
3.1. Restauración y descripción formal
⌅En noviembre de 2021 se llevó a cabo la restauración de la ketubá, tarea realizada por las restauradoras Cristina Nàjar y Magalí Anglada, del equipo de conservación y restauración Sot del Rector 46 Los proyectos de Sot del Rector se pueden consultar en http://www.sotdelrector.cat [consulta: 28 de agosto de 2023]. . El estado de conservación del pergamino era malo. Al ser utilizado como cubierta de un libro presentaba las degradaciones del propio material a lo largo del tiempo, además de los perjuicios derivados de la encuadernación, como roces con pérdida de tinta y deterioro del pergamino, sobre todo en los bordes de los cortes. Las tintas también presentaban deterioro de los aglutinantes, lo que había ocasionado grietas, roturas y pérdidas de color.
La restauración se planteó desde un punto de vista conservacionista, a través de la que se ha consolidado y estabilizado el estado del documento, siendo mínimas las intervenciones con el uso de materiales estables y reversibles. En primer lugar, se extrajo la cubierta del volumen en pergamino y se limpió y aplanó. Una vez consolidado, se protegió fijándolo a una cartulina con reserva alcalina y dentro de una funda transparente y transpirable.
A nivel formal, se trata de un fragmento de la parte inferior de la ketubá, en el que se recogen las condiciones matrimoniales y las firmas de los testigos. En concreto, se conservan nueve líneas de escritura hebrea en letra cuadrada (aunque la primera está rasgada y la segunda también ha perdido la parte central) y la firma de uno de los testigos (Natán b. Yosef) en cursiva. En la parte inferior se conserva escritura latina medieval, si bien no está relacionada con la ketubá. Asimismo, el pergamino presenta decoración geométrica y floral en color rojo en los márgenes laterales 47 En el caso de las ketubot catalanas, solo Barcelona 6 y Manresa presentan decoración; se trata de ornamentación geométrica en el margen derecho del pergamino. .
3.2. Los contrayentes y sus familias
⌅El texto de la ketubá ha sacado a la luz la identidad de cuatro judíos y de una judía. El novio se llama Yiṣḥac b. David b. Abamari; el padre de la novia, Šelomó ha-Cohén b. Neḥemía; y los testigos firmantes son Natán b. Yosef y Yiṣḥac ha-Leví b. Yosef b. Šemuel ha-Leví. Por su parte, el único nombre femenino es el de la novia, Reina.
La identificación de personas de confesión judía en la documentación catalana en latín o romance no es tarea fácil debido al uso extendido del doble nombre: es decir, los varones judíos tenían un nombre en lengua vernácula, que es el que aparece en la documentación latina y romance, y un nombre litúrgico, presente en los textos en hebreo 48 Riera i Sans 2014, 13-15. . Los nombres no suelen corresponderse entre sí, por lo que si no se conoce la relación entre ambos, se puede pasar por alto la identificación de un individuo49 Un ejemplo procede de la ketubá de Barcelona 2, en la que se recoge el doble nombre de Šelomó b. Šemuel, hermano difunto del novio y primer marido de la novia, que en la documentación en romance es conocido como Bonastruc Samuel, cf. Riera i Sans y Udina i Martorell 1978, 28-30. .
En lo relativo a la onomástica hebrea/judía, lo habitual es el sistema patronímico, que consiste en que el nombre del hombre está formado por su nombre propio seguido del nombre del padre y, en ocasiones, también del abuelo. Esta práctica nos permite conocer el nombre judío de varias generaciones de la familia por línea paterna: por ejemplo, sabemos que el padre del novio se llamaba David y su abuelo Abamari. Este sistema coexiste con la transmisión de un apellido, que se corresponde con el nombre del primer miembro preeminente de la familia; en el caso que nos ocupa, se constatan los apellidos Cohén (padre de la novia) y Leví (uno de los testigos). A diferencia de esto, en los textos en romance el nombre del judío suele ir acompañado por un sobrenombre o apelativo relacionado con su procedencia, profesión, característica física, etc.
Las mujeres siempre aparecen con la filiación familiar o marital, esto es, vinculadas al nombre del hombre en el que reside su potestad (hija de, mujer de o viuda de). En el área de estudio, el nombre suele escribirse en catalán, si bien, en el caso que nos ocupa, el nombre de la novia está escrito en castellano (Reina en lugar de Regina).
3.3. El contenido
⌅La ketubá de Girona 3 ha perdido el encabezado del documento, donde se registran los datos de los contrayentes y sus filiaciones, y también la información relativa al lugar y la fecha en la que se reunieron las familias para formalizar el contrato. En concreto, el fragmento recoge las fórmulas a través de las que Yiṣḥac b. David adquiere la responsabilidad del contrato matrimonial, comprometiéndose con Reina y sus herederos a restituirles la dote y las arras de sus propios bienes y posesiones, así como de los de sus herederos. Para ello, el novio hipoteca la totalidad de sus bienes (incluidas sus ropas) a fin de garantizar el cumplimiento de todas las obligaciones económicas de la ketubá, según la costumbre de Israel y sin necesidad de obtener el permiso de un betdín o de cualquier otra persona.
La primera parte del documento (líneas 2-5) presenta las condiciones o tenaim relacionadas con la distribución de los bienes del contrato en caso de disolución natural 50 Son las mismas condiciones que se han conservado en la ketubá de Girona 2, vid. Cortès i Minguella 2022, 203. . Como también se observa en otras ketubot catalanas, en el contrato se establece el derecho de los herederos de Reina a recuperar dichos bienes, si esta falleciera prematuramente. Aunque no se especifica si los herederos (yoršim) son los progenitores, los hermanos u otros familiares de la novia, todo parece indicar que la cláusula no se refiere a los hijos o descendientes (zerʿa šel cayamá). Así, se trata de una tenai que regula la relación matrimonial a la espera del nacimiento de un hijo o de una hija, o de su consolidación (después de un periodo de uno o dos años).
La segunda parte (líneas 5-9) reproduce un modelo de ketubá recogido por R. Simón b. Ṣémaḥ Durán 51 “באחריות וחמר כל שטרי כתובות שרירין וקיימין דנהיגין בישראל שתקנו חז"ל מיומא דנן ולעלם דלא כאסמכתא ודלא כטופסי דשטרי בבטול כל מודעי שמסרתי ושאמסור וקנינא מהחתן ר' יצחק יצ"ו בר אברהם יצ"ו הנזכר למרת רבקה ת"מ הנזכר' בת ר' בתואל הנזכר על כל מאי דכתיב ומפרש לעיל ועל הנאמנות בפירוש במנא דכשר למקניא ביה והכל שריר וקיים”, cf. Šimʿon ben Ṣemaḥ Duran, Séfer ha-Tašbeṣ, parte III, responsum 301:3 (Jerusalem, 1960, repr. Lemberg, 1891). . Esta aproximación —cotejar la información presente en la correspondencia rabínica y en las ketubot— no siempre ha sido establecida por parte de los estudiosos, pese a que el mismo Lacave ya apuntó la necesidad e importancia de aunar ambas fuentes. Así, tras indicar la conformidad y validez del contrato, la ketubá concluye con las firmas del novio y de los dos testigos.
A lo largo del texto, resulta llamativo comprobar que tras el nombre de la novia se añade el calificativo kalatá da. Este vocablo hebreo, que se contrapone al término virgen o betulá, indica que Reina ya no era doncella 52 R. Simón b. Ṣémaḥ Durán, citando a R. Šelomó b. Adret, se refiere a la obligatoriedad de especificar en la ketubá si la novia es, o no, virgen (betulá o kalatá da), así como si es viuda (almaná), divorciada (guerušá) o cautiva (šebuyá), vid. Šimʿon ben Ṣemaḥ Duran, Séfer ha-Tašbeṣ, parte III, responsum 301:7 (Jerusalem, 1960, repr. Lemberg, 1891). . El fragmento que se conserva nos impide saber si su estado se debía a un matrimonio previo o a otras circunstancias.
4. Documentos hebreos en contexto
⌅La ausencia de datos cronológicos y espaciales en la ketubá de Girona 3 plantea diferentes dudas sobre su “vida” y uso. Sin embargo, el recurso a otros documentos en hebreo y romance arroja luz en torno a su contexto histórico. La tipología de la letra (aunque no permite una datación muy precisa) y la presencia de dos de sus protagonistas (el padre del novio y un testigo) en otro pergamino hebreo nos lleva a considerar que la ketubá se remontaría a una fecha indeterminada entre finales del siglo xiii y comienzos del siglo xiv. En cuanto a las coordenadas geográficas, se toman como punto de partida las siguientes localizaciones: Peralada (en relación con el protocolo), Castelló d’Empúries (en lo relativo a la publicación del capellán Pujol), Girona (donde se halló el documento) y Besalú (lugar que consta en el pergamino hebreo donde aparecen los individuos anteriormente mentados).
4.1. Un episodio desencadenante: Girona, 1285
⌅La relación entre las comunidades judías de la región nororiental de Cataluña se consolidó a partir del siglo xii, alcanzando su apogeo a lo largo del siglo siguiente. Durante este periodo, las comunidades de Girona y Besalú estuvieron completamente relacionadas. De hecho, los primeros judíos que se establecieron en Besalú procedían de Girona, donde continuaron teniendo propiedades, familia y redes sociales. De manera paralela, el surgimiento de comunidades judías más pequeñas propició la aparición de un sistema de colecta con finalidad contributiva (con Figueres, Peralada, Castelló d’Empúries), en el que la aljama madre destacaba sobre el resto de las comunidades satélites; entre los siglos xiii y xiv, esa aljama principal fue la de Girona 53 Riera i Sans 2012, 12-15. La comunidad judía de Besalú adquirió la calificación de aljama en 1264 y, finalmente, se separó de la de Girona en 1342. . Basta mirar el mapa para percatarse de la relativa cercanía que tienen todos estos lugares entre sí: por ejemplo, Besalú dista de Girona unos 35 km., mientras que la separación entre la última y Castelló d’Empúries es de alrededor de 45 km. Por lo tanto, no ha de extrañar que la movilidad dentro del área fuera notable, aspecto que se constata ampliamente a través de la documentación (vemos a judíos haciendo negocios en distintas localidades, con diversos domicilios, estableciendo casamientos entre individuos de diferentes comunidades, etc.)54 La documentación procesal también revela la fluidez de las relaciones mantenidas entre individuos de las diferentes comunidades del área tras los sucesos de 1285. Ejemplo de ello es el proceso incoado contra Astruch Bondavid Saporta, vid. Riera i Sans 2000, 43-110. .
Tiempo y espacio conducen a un acontecimiento que podría haber repercutido, de una u otra manera, en la vida de los protagonistas de la ketubá: la cruzada emprendida por el papa Martín IV contra la Corona de Aragón. En el marco de este conflicto tuvo lugar la ocupación de Girona por parte de los franceses en 1285, episodio en el que el call fue saqueado y su población decreció notablemente 55 Riera i Sans 2012, 59-60. . Un año después, el rey Alfonso III restableció la aljama judía56 Riera i Sans 2012, 222-223, doc. 7. y en 1288, se constituyó en ella un betdín destinado a tratar asuntos relativos al extravío de documentos ocasionado a consecuencia de los últimos acontecimientos57 Entre 1285 y 1290, los monarcas Pedro III y Alfonso III emitieron órdenes destinadas a la renovación de escrituras perdidas (títulos de deuda, documentos de compraventa, libros hebraicos, etc.), ratificaciones y prórrogas, cf. Régné 1978, 267, docs. 1468-1470; 274, docs. 1501-1502; 276, doc. 1511; 303, docs. 1681-1682; 373, docs. 2110-2111. .
4.2. Una compraventa formalizada en Besalú y validada por un betdín de Girona (1284 y 1288)
⌅La restauración de la comunidad judía de Girona supuso la progresiva recuperación de un espacio físico para los judíos en la ciudad. Sin embargo, para hacer uso legal del mismo también fue necesario recobrar una parte de la historia documental que había perecido durante el conflicto. Hasta la fecha, diversos privilegios y gracias reales habían reconocido la validez pública de los contratos matrimoniales formalizados por judíos ante soferim y notarios cristianos, así como de otros documentos relacionados con la dote, las arras o su devolución. Del mismo modo, se concedía validez a todos los documentos de compraventa tanto los redactados en hebreo como en latín y romance 58 Uno de ellos fue un privilegio otorgado en 1271 por el infante Pedro a los judíos de Girona, Besalú y su colecta, cf. Burns 2003, 56, 154-155, doc. 10. .
Así, en 1288 ante un betdín de Girona 59 Los miembros de este betdín constituido en 1288 eran Yosef b. Haninay, Aharón b. Eleʿazar y Mair b. Yiṣḥac aben Rabalyá. Antes de ellos se menciona a Yosef ha-Leví b. Yiṣḥac, y Jaume Riera considera que también formaba parte del betdín, cf. Riera i Sans 2012, 60. Una alternativa a la propuesta de Riera es que se tratara de un error del sofer al escribir el nombre del propio solicitante, Yehošúʿa ha-Leví. se presentó Yehošúʿa ha-Leví, hijo de Yiṣḥac ha-Leví, habitante de Tarragona. Su pretensión era solicitar la comparecencia de los testigos que presenciaron la compra de unas casas ubicadas en el call de Girona, que este había hecho en el mes de šebat del año 1284, antes del saqueo de la ciudad:
… y cuando esta ciudad fue destruida, el documento de la mencionada venta se extravió. Por esta razón os pido que recibáis el testimonio de los testigos, que fueron invitados para dar fe de la mencionada venta y firmaron el documento de la mencionada venta, y que redactéis un documento con el testimonio de los mismos testigos para que me sirva de prueba 60 “וכשחרבה העיר הזאת אבד שטר המכירה הנזכרת בבקשה מכם שתקבלו לי עדות העדים שהיו מזומנים להעיד במכירה זו הנזכרת ושחתמו לי שטר מהמכירה הנזכרת ושתכתבו לי שטר בעדותן של אותן העדים כדי שיהא לי לראיה”, cf. Loeb 1885, 110-111. .
Las casas adquiridas por Yehošúʿa habían pertenecido a dos matrimonios emparentados de Girona: Tolsana y Yehošúʿa b. Zeraḥia b. Saltiel, de un lado, y Dolsa y Natán b. Šelomó b. Saltiel, de otro 61 En el texto se detallan las propiedades colindantes de las casas; al sur, se encontraba la vivienda de Yiṣḥac ha-Leví, padre del comprador. . Los testigos, que habían estado presentes durante la venta en el Castillo de Besalú y se personaron en 1288 ante el betdín para ratificar la transacción, eran Natán b. Yosef y David b. Abamari, individuos que ya son conocidos por aparecer mencionados en la ketubá de Girona 3 (uno por ser testigo de la ketubá y el otro por ser el padre del novio).
El documento publicado en 1885 por Isidore Loeb 62 Loeb 1885, 109-111, doc. I. no es una pieza documental suelta, sino que se han conservado otros dos manuscritos que completan la historia de las casas adquiridas por Yehošúʿa ha-Leví. Uno de ellos fue publicado en 1927 por Millàs i Vallicrosa63 Millàs i Vallicrosa 1927, 67-75, doc. I. , y aunque carece de fecha, por su contenido se deduce que es anterior a la solicitud presentada en 1288 por Yehošúʿa. Se trata de un duplicado legal avalado por un betdín64 El betdín que validó el primer duplicado estaba compuesto por David b. Yosef b. Messullam, Aharón ha-Cohén b. Eleʿazar y Mair b. Yiṣḥac aben Rabalyá. El segundo tribunal lo conformaron Mošé b. Šelomó b. Mair, Aharón ha-Cohén b. Eleʿazar y Mair b. Yiṣḥac aben Rabalyá. , en el que se reproducen íntegramente los documentos originales de la compraventa de las aludidas casas de Girona y de unos terrenos con viviendas situados a extramuros, que Yehošúʿa también había comprado a los vecinos gerundenses. La solicitante en este caso era Goig (escrito Goiš), la mujer de Yehošúʿa, a la que este había donado todos estos inmuebles como garantía de su contrato matrimonial («porque la mencionada doña Goig tiene derecho sobre dichas casas por su documento de ketubá, que tiene sobre su marido el mencionado Yehošúʿa ha-Leví»65 Millàs i Vallicrosa 1927, 67, 72. ). De este modo, y pese a que la compra de los inmuebles la había realizado únicamente Yehošúʿa, Goig quedaba instituida como su propietaria legítima. No obstante, el derecho solo se vería ejecutado en caso de que su marido o los herederos de este no cumplieran adecuadamente con la restitución de los bienes matrimoniales, es decir de la dote y las arras.
El duplicado en cuestión fue redactado a partir de las escrituras originales, que todavía se conservaban. La primera copia se corresponde con la compraventa de las casas del call de Girona (16 de šebat de 5044 / 4 de febrero de 1284), mientras que el segundo se refiere a unos terrenos con viviendas que se encontraban fuera de los muros de la ciudad (18 de šebat de 5044 / 6 de febrero de 1284):
Este es el duplicado de los dos documentos de las ventas mencionadas con sus legalizaciones, que hemos entregado a la mencionada doña Goig, letra por letra, palabra por palabra, sin adición ni extracción, después de que fueran validados ante nosotros por sus testigos […], para que esté en su mano como derecho de su documento de ketubá, que tiene sobre su marido, el mencionado R. Yehošúʿa ha-Leví 66 “זהו טופס שני שטרי המכירות הנזכרות והאשרתות שבהם שהטפסנו לה למרת גויש הנזכרת אות באות תיבה בתיבה בלא תוספת ובלא גירוע אחר שנתקיימו בפנינו בחתומיהם [...] כדי שיהו בידה לזכות שטר כתובתה שיש לה על בעלה ר. יהושע הלוי הנזכר”, cf. Millàs i Vallicrosa 1927, 71, 97, lámina I. .
En 1296, años después de los sucesos violentos de 1285, Goig y su marido Yehošúʿa, todavía residentes en Tarragona, hicieron donación de los bienes mencionados a su hijo Zeraḥia ha-Leví, que estaba casado con Reina 67 El acto se llevó a cabo en la ciudad de Barcelona, cf. Loeb 1885, 112-115, doc. II. . Además de esto, Yehošúʿa aportaba la mitad de una viña ubicada en los alrededores de Girona (¿Banyoles?68 Isidore Loeb se refiere a Balnovas, cf. Loeb 1885, 112, nota 4. ), que había heredado de su padre junto con su hermano Šelomó ha-Leví. Aunque el matrimonio hacía la donación en vida a su hijo, se reservaba para sí el derecho a disfrutar del usufructo de los inmuebles de Girona hasta su fallecimiento.
Recapitulando, en una fecha indeterminada anterior al mes de enero de 1284, Yehošúʿa ha-Leví se trasladó de Girona a Tarragona, posiblemente a causa de su matrimonio con Goig. No obstante, su vínculo con la primera ciudad se mantendría en el tiempo, como atestigua la documentación (1288-1296). Y es que su padre Yiṣḥac y su hermano Šelomó continuaron viviendo allí 69 En la donación de 1296 se especifica que Šelomó ha-Leví habitaba ahora las casas que habían pertenecido a su padre Yiṣḥac, vid. nota 61. Y es posible que viviera ahí, al menos, hasta 1325, puesto que en los protocolos notariales de Girona se menciona a un tal Salomó ha-Leví, hijo de rabí Issac, vid. AHG. Gi-02, 27-hecodavant 5/1397-1398, any 1325, cf. Llop i Jordana 2014, 49. , en unas casas contiguas a aquellas que adquirió Yehošúʿa, que, finalmente, heredaría su hijo Zeraḥia. De este caso se derivan tres sentencias fundamentales para entender a los judíos hispano-medievales y sus redes: 1) que una familia poseyera inmuebles y/o bienes en una localidad no significa que viviera ahí; 2) que la ketubá fuera redactada y/o firmada en un lugar determinado no implica que los novios residieran allí o lo fueran a hacer tras formalizar su unión; 3) que un contrato de compraventa fuera formalizado en un sitio concreto no conlleva que los bienes de la transacción se encontraran ahí.
4.3. La ketubá de Girona 3 a la luz de los documentos de Besalú y Girona
⌅La investigación realizada en torno a los individuos registrados en la ketubá de Yiṣḥac b. David y Reina nos revela un posible origen gerundense por parte de la familia del novio a partir de los manuscritos hebreos publicados por Isidore Loeb 70 Loeb 1885, 109-111, doc. I. y Josep Maria Millàs i Vallicrosa71 Millàs i Vallicrosa 1927, 67-75, doc. I. . Su hallazgo se produjo en el antiguo Arxiu de l’Hospici de Girona (diseminado hoy entre el diocesano y el histórico), si bien provenían de la Pia Almoina de la Seu de Girona desde donde fueron trasladados en el siglo xviii. Precisar el origen de los pergaminos es una cuestión del todo problemática, a la que se suma elucidar cómo llegó la ketubá a las cubiertas del protocolo de la notaría de Peralada. En este sentido, cobra especial relevancia la movilidad de los judíos a causa de matrimonio, como vemos en el caso de Yehošúʿa y su mujer Goig, que habitaban en Tarragona, pero tenían posesiones en Girona, ciudad donde residía la familia ha-Leví. Este también podría haber sido el caso del matrimonio de Yiṣḥac, cuyo padre residía en Girona o Besalú, y Reina, cuya procedencia no queda clara (¿Peralada? ¿Castelló d’Empúries? ¿Girona?).
El padre del novio, David b. Abamari, era hijo de Abamari y nieto de Yiṣḥac y es este último nombre el que da a su hijo, como se observa en la tradición judeo-catalana. En 1284 David actuó como testigo de la venta de los inmuebles emplazados en Girona hecha por los matrimonios de Tolsana y Yehošúʿa b. Zeraḥia b. Saltiel y Dolsa y Natán b. Šelomó b. Saltiel a Yehošúʿa ha-Leví, hijo de Yiṣḥac. Unos años más tarde (1288), David ratificó el contenido de la venta ante el betdín de la aljama de Girona 72 Según Jaume Riera, se trataría de la aljama judía de Besalú, vid. Riera i Sans 2012, 60. a causa de la pérdida del documento original. Por lo tanto, se puede asumir que el lugar de procedencia del novio es la ciudad de Girona o alrededores.
En el contrato también se alude a la filiación de la novia que es hija de Šelomó ha-Cohén b. Neḥemía, sin referencia a su procedencia. Entre los fragmentos hebreos ligados a los volúmenes notariales del Arxiu Històric de Girona, hay noticia de distintos miembros de la aljama de Girona (Astruc Vidal, Issac Bonjuda, David Abraham, Jucef Benvenist, Bellshom Falcó y Astruc Cresques) entre los que se encuentra Salomó Cohén 73 AHG. Gi-01, 180-codavant 9a/1368, cf. Valls i Pujol 2016, 137, 877. . Sin embargo, el documento data de la segunda mitad del siglo xiv (1360-70), por lo que se considera demasiado tardío. Haciendo un barrido por la documentación procedente de Castelló d’Empúries, a caballo entre los siglos xii y xiii, se menciona a un Salomó Cohén viviendo en la villa. Mientras la documentación de finales de la década de 1290 registra que es originario de Girona74 AHG. Ca, 11. El origen figuerense también se menciona en AHG, Ca, 25. , otras entradas señalan que es de Figueres75 AHG. Ca, 10; AHG, Ca, 127. . Salomó era hijo y heredero de Bonjuha Cohén. Su nombre aparece escrito de distintas maneras en un mismo manual: Salomó Chohén, Salamó Coén, y Salamó Cohén76 AHG. Ca, 11, fols. 21r, 23r y 24v. . Sin embargo, no es posible asegurar que este individuo fuera el padre de Reina, ya que el sobrenombre Cohén es muy común entre los judíos catalanes, aunque llama la atención su origen gerundense y su traslado a Castelló en una fecha posterior a la desmembración de la aljama de Girona.
También se conservan datos sobre los dos testigos de la ketubá. Natán b. Yosef actuó como testigo junto al padre del novio en la venta de casas realizada a Yehošúʿa ha-Leví. Respecto a Yiṣḥac ha-Leví b. Yosef b. Šemuel ha-Leví, podría estar emparentado con el comprador de la venta ya aludida o con Yosef ha-Leví b. Yiṣḥac, uno de los miembros del betdín de Girona 77 Cf. Loeb 1885, 110-111, doc. I. . De vuelta a la documentación en romance, es posible que Yiṣḥac se corresponda con Isaac, hijo de Juceff Samuel, que en el año 1291 recibió por parte del judío Caravita, hijo de Astruc Caravita, el derecho sobre una deuda de 144 sueldos contraída por el caballero Guillem de Palol78 ADG. Pia Almoina, Pergamins, N. Besalú Burgués, S. Pere Burgués, doc. 1891, cf. Escribà i Bonastre y Frago i Pérez 1992, 68, doc. 45 (se cita la signatura antigua). .
La relación que une al testigo Yiṣḥac ha-Leví con los contrayentes y sus familias es difícil de precisar; quizás actuara en calidad de miembro destacado de la aljama del lugar, aunque también podría reducirse a una relación de afinidad que uniera a este y a Natán b. Yosef, el primer testigo firmante, con los novios y sus familias. No es la primera vez que se pone de relieve la presencia recurrente de determinados individuos actuando en calidad de testigo 79 Lacave 2002, 84-85. . Más allá de esto, la aparición de Natán tanto en la documentación relativa a las compraventas, como en la ketubá sugiere que fuera el escribano de ambos contratos.
5. Consideraciones finales
⌅La aparición de la ketubá de Girona 3 supone la recuperación de una pieza del patrimonio documental hebreo, ascendiendo a dieciocho el número de contratos matrimoniales formalizados por judíos catalanes. Esta, en concreto, aporta noticias sobre las condiciones acordadas por un matrimonio judío del área gerundense entre finales del siglo xiii y principios del siglo xiv. La ocasión permite realizar una actualización del repertorio publicado en 2002 por Lacave y una aproximación conjunta de las ketubot catalanas conocidas hasta la fecha. Fragmentos que, puestos en común, aportan una visión más completa acerca de la concertación de un matrimonio entre judíos y posibilitan un análisis incipiente al respecto de las cantidades económicas aportadas por las familias de los contrayentes y su posible contrastación con la documentación notarial, las condiciones establecidas en los contratos y su reminiscencia en los formularios contenidos en los responsa rabínicos.
El estudio del contrato en cuestión permite constatar algunos aspectos. En primer lugar, la necesidad de complementar la documentación hebrea, asumiendo la inversión de tiempo que conlleva (¡la notaría de Castelló d’Empúries conserva 263 manuales datados entre 1295 y 1335!). También las dificultades presentes para identificar a las personas implicadas y su denominación en la documentación en romance; la movilidad de las familias judías tampoco facilita dicha tarea. Aun así, cabe apuntar la importancia de las cláusulas añadidas en los contratos matrimoniales, ya que regulan los aspectos económicos de la transmisión en el marco de un régimen matrimonial concreto. Otro aspecto por señalar es la necesidad de reflexionar acerca de la profesionalización de los testigos, puesto que, como apuntaba Elka Klein, además de dar fe del acto notarial, el sofer también ratificaba la validez del compromiso actuando como testigo.
En Retalls de la vida dels jueus, el desaparecido Jaume Riera escribía que «Els jueus presenten una gran mobilitat. Contínuament van de l’un cantó a l’altre. Tal dia són a Besalú, tal dia són a Castelló, tal dia se’n van a Perpinyà» 80 Riera i Sans 2000, 100. , una sentencia que ha de ser trasladada a la historia de sus propios documentos. La localización de los manuscritos hebreos publicados por Loeb y Millàs y, ahora, de esta ketubá ha sido fruto del tiempo y del azar. La ketubá se incorpora a un protocolo de Peralada en una fecha indeterminada a comienzos del siglo xiv, y este fondo llega al Arxiu Històric de Girona en el siglo xx. Su hallazgo ha supuesto la excusa perfecta para poner la mirada de nuevo en los pergaminos hebreos procedentes de la Pia Almoina (hoy, en el Arxiu Diocesà de Girona), aquellos que alguna vez, quizá, pertenecieran a un archivo comunitario, familiar o de un sofer, en cuyo origen radicaría la lógica de su conservación. Y, de este modo, es como la investigación nos lleva a aunar nuevos datos con otros conocidos y a revisar estos últimos, abriendo vías a transitar por los (futuros) especialistas en Historia de los judíos.
Transcripción y traducción de la ketubá de Girona 3
⌅Finales de siglo xiii ‒ principios del siglo xiv. Área gerundense.
Ketubá del matrimonio entre Reina, hija de Šelomó ha-Cohén, y Yiṣḥac, hijo de David. Se conserva solo la parte inferior de la ketubá, en la que se registran las condiciones matrimoniales y las firmas del novio y de los testigos.
AHG. Col·lecció de manuscrits hebreus de l'Arxiu Històric de Girona, 15
Pergamino. 305 × 532 mm. Decoración floral y geométrica en ambos laterales.
1[…]2 תנאי כתובה ולכל מה שנזכר ונכלל בשטר כתובה זה. למ]גבי[ מנהון הכל בלי פחת הן היא הן יורשיה הן הבאים3 ברשותה הן ממני הן מיורשי הן מן הבאים ברשותי ואפלו מעדי עדית שבקרקעות וממבחר שבכל שאר נכסים4 ומכל מה שתברור בכל נכסי מרת ריינה כלתא דא הן היא הן יורשיה הן הבאים ברשותה הן ממני הן מיורשי הן מן5 הבאים ברשותי ואפלו מגלי מאד על כתפאי בלא רשותי ובלא רשות שום בית דין ואדם בעולם באחריות וחומר.6כל שטרי כתובות העשוין כענין זה קימין דנהיגין בישראל שתקנו חכמים מיומא דנן ולעלם דלא כאסמכתא7 ודלא כטופסי דשטרי. וקנינא מן החתן ר. יצחק בר דוד הנזכר למרת ריינה כלתא דא הנזכרת בת ר. שלמה הכהן בר8 נחמיה הנזכר על כל מה דכתיב ומפרש לעיל ועל הנאמנות בפירוש במנא דכשר למקניא ביה. כת דעל הגרר. והכל9 שריר וקים. יצחק החתן בר דוד צ''ו בר אבאמרי ז''ל. נתן בר יוסף ז''ל עד 81 La firma del testigo Natán b. Yosef (נתן בר יוסף ז''ל עד) está escrita en cursiva. . יצחק הלוי בר יוסף בר שמואל הלוי ז''ל ה''ה עד.
1[…] 2condiciones de ketubá y para todo lo que se menciona e incluye en este documento de ketubá con el propósito de que todo sin depreciación sea tanto suyo como de sus herederos y de 3sus apoderados tanto de lo mío propio como de lo de mis herederos y de lo de mis apoderados, incluso del mejor ornamento de los bienes inmuebles, y de la elección presente en cada registro de bienes, 4y de todo lo que doña Reina, que no es virgen, elija de cada bien sea tanto suyo como de sus herederos y de sus apoderados, tanto de lo mío propio como de lo de mis herederos y de lo 5de mis apoderados, e incluso la camisa que porto en mis espaldas, sin mi aprobación y sin la aprobación de ningún betdín u hombre en el mundo con responsabilidad y deber. 6Todos los documentos de ketubot hechos como este según la costumbre en Israel que los sabios decretaron desde este día y para siempre, que no son como una fórmula 6ni como un formulario de documentos. Y el compromiso del mencionado novio R. Yiṣḥac, hijo de David, para con la mencionada doña Reina, que no es virgen, hija del mencionado R. Šelomó ha-Cohén, hijo de 8Neḥemía, sobre todo lo que está escrito y especificado arriba y sobre la lealtad explícita de acuerdo con la ley judía. Y todo es 9firme y estable. Yiṣḥac, el novio, hijo de David, de bendita memoria, hijo de Abamari, de bendita memoria. Natán, hijo de Yosef, de bendita memoria, testigo. Yiṣḥac ha-Leví, hijo de Yosef, hijo de Šemuel ha-Leví, cuyo recuerdo viva en el mundo que viene, testigo.
Agradecimientos
⌅Los resultados preliminares de esta investigación fueron divulgados en la ponencia «Retalls d’una història entre protocols: la quetubà de Girona», presentada en el International Medieval Meeting of Lleida (Universitat de Lleida, 2022). Agradecemos a los revisores por contribuir a la mejora del texto original.
Declaración de conflicto de intereses
⌅Las autoras de este artículo declaran no tener conflictos de intereses financieros, profesionales o personales que pudieran haber influido de manera inapropiada en este trabajo.
Declaración de contribución de autoría
⌅Irene Llop-Jordana: conceptualización, investigación, redacción – borrador original, redacción – edición y revisión.
Marina Girona Berenguer: conceptualización, investigación, redacción – borrador original, redacción – edición y revisión.